El programa ‘Cuid-Arte’ está dirigido a familiares de personas dependientes
Redacción 7-7-2021
Los centros de día Stima han puesto en marcha el grupo ‘Cuid-Arte’, dirigido a familiares de personas dependientes. Se trata de un grupo de apoyo a cuidadores que se reúnen con los profesionales de los centros Stima con el objetivo de tratar temas relacionados con las enfermedades que se abordan en los centros. Además, los asistentes pueden trasladar todas las dudas que surgen en el cuidado diario de la persona mayor dependiente a los profesionales del centro. Las sesiones se celebran cada 15 días, durante dos horas, y de forma telemática, a través de zoom.
«Con motivo de la pandemia nos vimos obligados a paralizar estos grupos temporalmente para minimizar el riesgo de contagios dentro de los centros. Ahora, después de valorarlo mucho, lo hemos retomado de forma telemática porque la necesidad de las familias aumentaba y empeoraba con la situación actual que vivimos”, explica Patricia del Barco, directora de operaciones del Grupo Stima.
Además, no sólo se dirige a los cuidadores de los usuarios de los centros del grupo, sino también a todas aquellas personas interesadas. «Normalmente se invita a las familias que se han puesto en contacto con nosotros por algún motivo, se envía la información a trabajadoras sociales de la zona y a médicos u otros colaboradores. El interés de Stima es el de ayudar a cuantas más familias mejor», manifiesta la directora de operaciones.
Beneficios de esta formación
Desde Stima explican que los efectos positivos son múltiples tanto para los cuidadores como para la persona cuidada. En primer lugar los cuidadores mejoran los síntomas de la sobrecarga que padecen, se sienten apoyados, están más y mejor formados a cerca de la enfermedad de la persona mayor, sienten menos soledad, están más relajados y en general sienten compañía en el largo camino de los cuidados a una persona dependiente. Por su parte, las personas mayores se benefician de un cuidador que cuida con más calidad, más feliz y tranquilo. «Un cuidador o cuidadora que no tenga sobrecarga colaborará mejor en continuar el trabajo que se hace en el centro de día cuando el mayor está en casa”, asegura Patricia del Barco.