La Xunta destaca que la formación en el ámbito de la dependencia debe mejorar el servicio, pero también prevenir riesgos en el ejercicio de los cuidados

La Xunta desarrolla ocho talleres gratuitos dirigidos a 73 personas en ayuntamientos de las cuatro provincias con el fin de trasladar buenas prácticas de salud y seguridad laboral a las personas cuidadoras

Redacción 7-12-2021

El director general de Mayores y Personas con Discapacidad de la Xunta de Galicia, Fernando González Abeijón, acompañado de la gerente del Instituto Gallego de Seguridad y Salud Laboral (ISSGA), Adela Quinzá-Torroja, asistió a la entrega de diplomas del curso Prevención de riesgos laborales en tareas de ayuda a domicilio y atención a la dependencia, dirigido a profesionales del sector. Allí destacó que la formación en la dependencia “debe estar destinada a mejorar el servicio, pero también a prevenir riesgos para sus profesionales”.
Acciones como la de Mondoñedo, en la que participaron 16 personas, permitieron analizar buenas prácticas en la ergonomía a la hora de movilizar personas con discapacidad motora, riesgos químicos y biológicos y psicosociales, o pautas de higiene postural en el desempeño de las funciones de cuidado.

La gerente del Instituto de Seguridad y Salud Laboral de Galicia (Issga) remarcó, por su parte, que supone una novedad que esta campaña se dirija al área de bienestar social. “Cuidar al medio rural significa conocer que estos servicios son necesarios por tener una población cada vez más envejecida y con más personas dependientes”, afirmó. Con estas acciones la Xunta está poniendo el acento en cuidar al cuidador.

El Gobierno gallego está apostando, asimismo, por la prevención de riesgos en una actividad muy feminizada que se desarrolla en domicilios particulares de las personas a cuidar. Por eso el Issga viene de organizar ocho talleres gratuitos, algunos todavía en curso, en ayuntamientos de las cuatro provincias -Maceda, Ortigueira, Narón, Celanova (dos ediciones), Mos, Viladecruces y Mondoñedo)-, en los que tomaron parte un total 73 personas.

“El primer escalón para un empleo de calidad y un trabajo seguro, y en actividades altamente feminizadas como esta, es el de redoblar el esfuerzo y otorgar una adecuada información hacia garantizar la seguridad y salud de las personas trabajadoras”, insistió Quinzá-Torroja.

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