El encuentro estuvo organizado por la Institución Ferial de Extremadura-FEVAL y Adiper Servicios Sociosanitarios
Redacción 27-9-2021
Las nuevas tecnologías aplicadas al cuidado de las personas en todas las etapas de la vida, así como diferentes experiencias y buenas prácticas relacionadas con la innovación y la Responsabilidad Social Corporativa (RSC), han estado presentes en el I Congreso de Economía Plateada, que se ha celebrado en el Palacio de Congresos de Mérida. El encuentro, organizado por la Institución Ferial de Extremadura-FEVAL y Adiper Servicios Sociosanitarios, ha estado patrocinado por CaixaBank.
El congreso fue inaugurado por el consejero de Economía, Ciencia y Agenda Digital de la Junta de Extremadura, Rafael España, que abogó por el fenómeno de la economía plateada para el fomento e impulso de oportunidades con la adaptación a las necesidades y demandas de los mayores de 65 años en forma de nuevos negocios y profesiones y en espacios y entornos que posibiliten y propicien el envejecimiento activo y saludable para prevenir y retrasar la discapacidad y/o la dependencia del sector. El consejero estuvo acompañado por el alcalde de Mérida, Antonio Rodríguez Osuna y de la consejera de Igualdad, Justicia y Políticas Sociales del Gobierno Vasco, Beatriz Artolazabal. La clausura del congreso corrió a cargo del vicepresidente segundo y consejero de Sanidad y Servicios Sociales de la Junta de Extremadura, José María Vergeles, que dio por convocada la siguiente edición.
Las nuevas tecnologías, concretamente las TIC, pueden contribuir a mejorar la calidad de vida de las personas mayores en todas las etapas de la vida, fomentando un envejecimiento activo y saludable.
Juan Carlos Santamaría González, director de Comunicación en Inithealth (Grupo INIT), director de comunicación de Inithealth (Grupo Init), y además miembro del Comité Científico del congreso, expuso cómo la tecnología ayuda a fomentar hábitos de vida saludable también en el ámbito de la Economía Plateada, y por qué se ha convertido en una palanca clave en la transformación de las organizaciones y en el impulso de los negocios.
“Las nuevas tecnologías en el campo de la salud nos abren un abanico de posibilidades, alargando el brazo de las personas y entidades responsables del cuidado (aseguradoras, sanidad pública y privada, servicios sociosanitarios, empresas, compañías de seguros, etc.) y de las personas objeto de los cuidados”, explicó Juan Carlos Santamaría que hizo su habitual llamada animando a las compañías de seguros a crear nuevos productos enfocados a mayores de 50 o 55 años que vinculen los hábitos de vida saludable con descuentos en la prima o en tarjetas de fidelización. Además, compartió la visión de un modelo de Empresa Saludable basado en la plataforma tecnológica Inithealth, que permite construir planes de salud para acompañar a las personas en la gestión de su salud.
Este foro también sirvió para poner en valor la experiencia de Grupo Init en el desarrollo de productos tecnológicos en el ámbito de la prevención en salud, donde se enmarcan proyectos como Cronicare, para mejorar la atención y prevención de pacientes crónicos complejos en situación de dependencia social y con asistencia a domicilio; el proyecto Fragicare, orientado a la gestión de la fragilidad de personas en domicilio y Serwes, de servicios de apoyo para residentes y personal de residencias.
A continuación, Karmele Acedo, CEO del Grupo SSI Servicios Sociales Integrados, grupo cooperativo que trabaja en Euskadi en el sector de la atención domiciliaria, explicó que incorporación de la tecnología les ha permitido completar y mejorar “nuestra prestación presencial”. En este sentido, han puesto en práctica diferentes proyectos que les ha permitido ofrecer apoyo psicológico a usuarios y familiares, prevención de caídas, control y recordatorio de medicación, etc. Desde su experiencia, Acedo ha asegurado que “hay poco mercado para la economía plateada, porque es poco conocido. El tejido empresarial no compra los productos y servicios relacionados con el envejecimiento activo”. En todo este proceso, Aceso entiende que la formación de las trabajadoras es prioritaria para dotarlas de competencias digitales.
Por su parte, Miguel Ángel Valero Duboy, profesor titular de la Universidad Politécnica de Madrid y delegado del director de la ETSIS Telecomunicación para Accesibilidad y Responsabilidad Social, coincidió en que la innovación tecnológica mejora la calidad de vida de las personas. “Pero debemos diseñar productos y servicios de los que puedan apropiarse y hacerlos propia”, ha subrayado. Para ello, las tecnologías deben ser accesibles para todos desde punto de visa cognitivo, físico y sensorial. “Pero, además, debemos contar con la participación, implicación y conocimiento de las personas mayores en el diseño del producto o servicio. Así la probabilidad de que les satisfaga será más alta y el riesgo de abandono por un mal uso de la tecnología no sea una opción”, concluyó Valero.
Finalmente, Raúl Prieto, CIO MAPFRE Digital Health–Savia, presentó la plataforma de servicios de salud de Mapfre, que se caracteriza por sus servicios de prevención y acompañamiento. “La base tecnológica nos cuida, pero el verdadero valor lo aportan los profesionales de la salud. Ellos hacen posible el chat, las videoconsultas, la receta privada electrónica prescrita por el especialista, el diagnóstico en base a unos parámetros y los contenidos de salud”, detalló. Para prestar la mejor atención, Savia analiza las interacciones de los pacientes y, mediante modelos de inteligencia artificial, valora cuál es su estado de salud y los pasos a seguir.
Respuestas a las nuevas necesidades sociales
En la mesa “Nuevos modelos de R.S.C. dando respuesta a las nuevas necesidades sociales”, Isabel Raminhas, representante de Grupo Nabeiro, Delta Cafés, dejó de que para su grupo de empresas la prioridad son las personas, “trabajar la responsabilidad social de la casa. Nosotros vamos adaptándonos a las necesidades de las personas, que son cambiantes”. La preocupación por las personas, por su calidad de vida, “es el primer punto de esa responsabilidad social”, que comparten los casi 4.000 trabajadores, porque “ellos también son preocupación de la empresa, son el primer paso de esa responsabilidad porque han comprobado que trabajamos para facilitar la conciliación con su vidas familiares”.
Por su parte, Antonio Campos, de DIRSE, de la http://www.dirse.esAsociación Española de Directivos de Responsabilidad Social, fue el encargado de desarrollar el término de R.S.E. en Extremadura y de su sistema de verificación. Ha explicado que la ética y la sostenibilidad han pasado a ocupar un lugar muy significativo, “decisivo” en las empresas, siendo el Dirse un perfil profesional que está en cambio constante y que “genera siempre un impacto positivo en la sociedad”.
Retos para las empresas
La Senior Manager en FORÉTICA, Ana Gómez, se centró en analizar cuáles son los retos que en materia de sostenibilidad deben hacer frente las empresas, que vienen trabajando dos temas principalmente: la cultura del trabajo y la inclusión. Con respecto al primero de ellos, y ante el progreso de la digitalización, el talento sénior será el más vulnerable ante los cambios que acontecen en el tejido empresarial. Esa transición debe ser “ética, inclusiva, poniendo a los mayores en el centro del cambio”. Además, muchos perfiles se han visto afectados en las empresas durante la pandemia, como las mujeres con hijos o mayores a cargo, las personas mayores y las personas con discapacidad. Esta situación “es un reto, porque cada vez son más los estudios que aseguran que la diversidad suma valor a las empresas”.
El presidente de Corresponsables, Marcos González, fue el encargado de explicar el papel de los medios de comunicación para difundir lo que hacen las empresas en materia de responsabilidad social. Los medios “tenemos un papel fundamental a la hora de poner en valor la sostenibilidad, de visibilizarla”, porque la R.S.C. sirve para “dar respuesta a retos globales como el envejecimiento de la población”. La clave es dar a conocer cómo pueden responder las empresas a los retos que surjan, como es el envejecimiento. En esta materia, González concretó que “hay que tener presente la gran diversidad que pueden convivir en las plantillas de las empresas”.
Por último, la directora Internacional de SALUUS, María Barco, se centró en analizar la responsabilidad de las pymes orientada a las personas mayores, asegurando que se trata de “una oportunidad que no debemos dejar pasar”. Más del 90 % del tejido empresarial español está constituido por las pymes, cifra que es señal de su importancia. “Pymes que son espacios que compartimos todos, también las personas mayores”, el único sector de la población que seguirá creciendo. “Durante la pandemia hemos comprobado cómo mayores y pymes se han retroalimentado”, se necesitan mutuamente. “Toda RSC pasa por hacer más fácil la vida a las personas mayores”, convirtiendo sus espacios en lugares amigables con los mayores, ha concluido Barco.